El 20 de noviembre es el Día Mundial del Niño, una
maravillosa oportunidad para crear conciencia en las escuelas y en la sociedad
en general de que la infancia es una etapa de la vida irrepetible y crucial y
que hay que conseguir que todos los niños y niñas estén protegidos, seguros,
con salud y educación, independientemente del lugar de su nacimiento.
Son el colectivo más vulnerable, sobre todo, ante situaciones
de crisis y problemas. Este día mundial recuerda que los niños tienen derecho a
estar seguros, protegidos, tienen derecho a la salud y a la educación,
independientemente del lugar en el que hayan nacido.
Dedicar un día internacional a la infancia también sirve para
hacer un llamamiento mundial a las necesidades de los más pequeños, y para
reconocer la labor de las personas y profesionales que trabajan a favor de los
niños y niñas.